Es probable que al escuchar la palabra "trufa" tu mente inmediatamente la asocie con el "diamante negro", un hongo subterráneo bastante popular en la cocina gourmet, o si eres más aficionado al dulce, es más probable que pienses en un delicioso bocadillo de chocolate.
De cualquier manera, es poco probable que las frutas mágicas sean lo primero en lo que pienses. Estas son una variante de las setas alucinógenas, que, a pesar de ser primos cercanos, se diferencian principalmente en su forma de crecimiento.
Aunque las trufas mágicas tienen notables diferencias físicas con las setas, sus efectos psicodélicos no difieren demasiado, ya que ambas contienen psilocina y psilocibina, lo que genera un efecto similar (aunque algunas personas podrían argumentar lo contrario).
Sin embargo, lo más intrigante de las frutas mágicas es su estatus legal. Su situación está llena de lagunas que pueden ser aprovechadas sin enfrentar consecuencias legales.
Trufas mágicas, un hongo alucinógeno legal en España
Las trufas mágicas, un tipo de hongo alucinógeno, son legales en España. Aunque comparten similitudes en composición con las conocidas setas alucinógenas, difieren en su forma y método de cultivo. Las trufas son más fáciles de cultivar debido a sus requisitos mínimos, aparte de la temperatura. En España, estas trufas han experimentado un creciente interés en los últimos años.
Aunque no se consideraban un producto enteógeno para el público en general, se percibían más como un artículo gourmet, reservado para cultivadores experimentados y aficionados. Sin embargo, con el aumento de la demanda de setas en todo el mundo, las trufas mágicas han comenzado a ganar terreno en el mercado español.
Legalidad de las trufas mágicas en España
Cierto, suena algo inusual, pero es una realidad: las setas mágicas son legales en España. Esto significa que podemos cultivar este tipo de hongos alucinógenos y poseer equipos de estudio micológico, los cuales son esenciales para su cultivo adecuado.
Aunque sean legales, siempre sugerimos que se utilicen con fines de estudio micológico, colección o decoración. Sin embargo, la responsabilidad sobre el uso de este producto recae exclusivamente en el lector.
Ámsterdam, el detonante de su popularidad
Si nos referimos al aumento en popularidad de las trufas, es importante entender su contexto. Los Países Bajos han sido conocidos como un epicentro para aquellos interesados en sustancias psicoactivas, gracias a su actitud liberal hacia las drogas. Durante décadas, fueron conocidos por la marihuana y luego se convirtieron en pioneros en el consumo de hongos psicodélicos.
Sin embargo, este panorama cambió drásticamente cuando se prohibió la venta y consumo de setas mágicas en 2008, tras una serie de incidentes, algunos trágicos, que se atribuyeron erróneamente al consumo de estos hongos. A pesar de informes que sugerían que muchos de estos incidentes tenían causas subyacentes, como problemas de salud mental, y la ausencia de rastros de psilocibina o psilocina en las autopsias, se tomó la decisión de prohibir todos los tipos de hongos. Esto resultó en un declive en el mercado de setas.
No obstante, las trufas, que técnicamente no son hongos, se libraron de esta prohibición. Bajo el principio legal de "lo que no está expresamente prohibido por ley no puede ser considerado un delito", las trufas no fueron penalizadas. Aprovechando esta laguna legal, el mercado de las trufas comenzó a florecer, emergiendo de entre las cenizas dejadas por sus primas, las setas.
¿Dónde se pueden comprar?
Gracias al gran auge y aceptación que han experimentado las trufas mágicas, ya no es necesario viajar a Ámsterdam para disfrutar de ellas. En la actualidad, es posible adquirir un kit de estudio micológico por internet sin preocuparse por cuestiones legales.
Para aquellos que estén más interesados en los efectos que en el proceso, también es posible comprar trufas mágicas online sin riesgo de enfrentarse a la intervención policial. Es importante recordar que no existe ninguna ley que prohíba el cultivo de trufas con fines de estudio o colección.
Antes de concluir, queremos hacer hincapié en que el uso de las trufas mágicas está destinado únicamente al comprador y no fomentamos de ninguna manera el consumo de sustancias psicoactivas.